En este capítulo describen a cada unas de las tres hermanas de esta forma: María de Angeles, es la más bonita de las tres siempre habla acerca de eventualidades políticas y sociales. Hace todo el tiempo obras de caridad, es una dama rosada que apoya obras sociales. Es viuda pues su esposo murió por una caída en el baño y un segundo pretendiente la plantó. Le gustaba coquetear.
Aura María era un mujer humilde muy cristiana que tenía un rostro bonito pero tiene un defecto físico en sus piernas siendo una pierna más corta que la otra. Ella tiene un salón de belleza con dos empleadas y ella atiende a las mujeres ricas de su comunidad.
María Margarita es la mayor le gustaba leer en un amplia biblioteca y hacía las tareas domésticas y del hogar, era la dueña de la casa, le gustaba cocinar y lo hacía muy bien. Se sentía frustrada porque su padre le ahuyentó a los pretendientes por considerarlos menos que ella.
Las tres hermanas volvieron a discutir por el futuro de Manuel y acordaron pedir ayuda con conocidos de la Cruz Roja y la Protectoría de Menores para localizar a la familia del niño. Como Manuel salía con María de los Angeles los vecinos comenzaron a inventar historias acerca de que podría ser hijo de ella y de alguno de sus amantes y que su embarazo habría correspondido a épocas en que ella no había estado en casa por largo tiempo.
El niño por su parte extrañaba a su amigo el taxista el viejo Santiago Solís.
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